Dragon's Dogma
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Tarea de protección
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Resumen de misión

Tarea de protección es una misión disponible en Dragon's Dogma y Dark Arisen.

Registro de misión[]

Resumen[]

Madeleine, la vendedora, desea protección para llegar al campamento. Esperas sacar algo de valor de esta molesta tarea de escolta.

Detalles[]

  • Escolta a Madeleine al campamento
A pesar de su preocupación por la seguridad, Madeleine no deja de alejarse. Síguela de cerca mientras vais al campamento.

Diálogos[]

Aceptar unirse a Madeleine para superar sus problemas desencadenará la misión

Contexto y detonador[]

(Madeleine) —Oh, te conozco. Eres el que empuñó el acero para expulsar al dragón de Cassardis, ¿no? He oído hablar de llo. Y, por supuesto, tú me conoces a mí. Vengo por aquí de vez en cuando a reponer existencias. Eh… te acuerdas de mí, ¿no? ¿Madeleine?... ¿La mejor vendedora ambulante de todo Gransys? ¿La belleza arrebatadora de leyendas y canciones? ... ¿Madeleine? Bueno, no importa. Tengo problemas más importantes. Vivimos tiempos aciagos, tan terribles que me llevan al borde de las lágrimas incluso a mí. Y aun así, justo cuando necesito la ayuda de alguien listo y fuerte... legas tú. ¡Verdaderamente, estamos predestinados a asociarnos! ¿No crees?
(Creo que no.) (Madeleine) —¡Demonios! Es innegable que entre nosotros hay química. ¡Incluso alguien tan obstuso como tú tiene que darse cuenta de ello! ¡Tú, el(la) poderoso(a) guerrero(a) que ha salvado este pueblo de la ira del dragón! Lo lógico es que a continuación me ayudes a mí.
(Madeleine) —¿No te das cuenta de que nos han unido nuestros destinos? ¡Y proteger a tan hermosa doncella en un momento de necesidad es una oportunidad única!
(En efecto.) (Madeleine) —Sólo un necio sería incapaz de percibir la hebra del destino que nos une. ¡Sin duda, vas a ser mi salvador, y después, salvarás el mundo entero! Y con eso, debemos partir. Supongo que has oído hablar del campamento que hay a las afueras del pueblo. Debo ir allí a toda prisa, pero últimamente los caminos están llenos de peligros. ¿Puedes llevarme hasta allí a salvo?

Desarrollo de las fases[]

Cassardis:

(Peón inexperto) —No tengo consejos que dar
(Peón experimentado) —El campamento no está lejos de aquí. La joven estará bien.
(Peones) —¿Todo listo para escoltarla, Arisen? Marchémonos de aquí. Será mejor que velemos por la seguridad de Madeleine.
(Madeleine) —Aún no consigo imaginarme cómo expulsaste del pueblo a esa terrible sierpe… Verdaderamente, el dragón ha escogido el peor momento. Estaba a punto de cerrar varios tratos en Gran Soren cuando atacó. Deberías labrarte un futuro en la capital, ¿sabes? Alguien que puede poner en fuga a un dragón no tendría problemas para encontrar clientes. Es una pena que los monstruos hayan obligado a cerrar el paso de montaña que conduce allí... ¡También tenemos que agradecerle eso al dragón! Voy al campamento para hablar con el capitán de la guardia y averiguar cuándo van a volver a abrir el paso. Es cierto que hay otras formas de llegar a la capital. Otros caminos... Pero ya basta de cháchara. Deberíamos ponernos en marcha.
(Madeleine) —¿Qué es lo que pretendes, ser?
(Madeleine) —Vamos a ponernos en marcha.

Sendero Brisa Marina:

(Peón) —Si seguimos el camino, llegaremos al campamento en un santiamén.
(Madeleine) —Espera un momento. Aquí hay algo…
(Peón) —Una mujer muy… fogosa.
(Madeleine) —¡Ajá, oro! ¡Esto sí que es un gustazo!
(Peón) —Esa mujer revolotea como una abeja borracha…
(Peón) —Esta chica es más caprichosa que una princesa…

Campamento:

(Madeleine) —Puede que esto suene inapropiado, pero… ¿Tienes algo de dinero? ¡Por favor! Debo llegar a la capital, pero corren malos tiempos y mi bolsa está muy vacía. Ser pobre es una maldición horrible. Hay veces que tengo que hacer un gran esfuerzo por contener las lágrimas. ¿Puedes darme un poco de oro? Por supuesto, te lo devolveré... en algún momento. ... Probablemente.
(Pagar 1.000 M por sus gastos de viaje.) (Madeleine) —Estoy locamente enamorada de ti en este momento. El corazón de una mujer es una criatura peligrosa, pero sabes muy bien cómo domarlo. A menudo se dice que la vida del pobre está llena de felicidad. Nunca he visto que eso fuera cierto. Si alguna vez la fortuna te lleva a Gran Soren y me permite montar mi propia tienda, tienes que hacerme una visita. ¡Incluso te haré un descuento! ... Uno pequeño.
(Negarse) (Madeleine) —¿¿¿???
(Peón experimentado) —Quizá tengamos ocasión de volver a verla en Gran Soren.
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